HALCONES DE ULTRAMAR: CORMAC FITZGEOFFREY, de Robert E. Howard, en cómic

Ficha Halcones de UltramarCada cierto tiempo encontramos la agradable sorpresa de una nueva obra de Robert E.Howard adaptada al cómic; obras que, sin ser de sus personajes princi-pales, se venden, y mucho, aunque no todas resulten atractivas o bien realizadas, ya sea por la propia adaptación o el dibujo modernista (en mi opinión, al tejano le va un dibujo clásico, realista, y no otro).  Confieso que en este caso he quedado muy satisfecho, con el resultado final de Halcones de Ultramar, uno de los dos (y medio) relatos que REH escribió sobre Cormac Fitzgeoffrey; que me ha llamado la atención tanto como en su día lo hizo la serie de otro personaje con igual nombre, Cormac Mac Art, adaptado por Roy Thomas y E.R.Cruz, en 1990.

Damián Couceiro

Damián Couceiro

¿Pero quién es Cormac FitzGeoffrey?  Se trata de uno de los varios personajes creados por Howard como protagonista de historias ambientadas en Las Cruzadas, con un importante componente de realismo histórico detrás; un anticipo (junto a Kull de Valusia) del propio Conan (su descripción física es prácticamente la misma: más de dos metros de altura, ojos fieros y azules, melena de cuervo), que dispone de ese punto de salvajismo heredado de sus ancestros que le diferencia de otros, de costumbres refinadas por la civilización; eso sí, es bastante más amargo, sin la alegría innata del cimmerio. Cormac es un cruzado irlandés (mitad gaélico, mitad normando), de sangre noble, renegado, y sin señor al que seguir (incluso niega ese honor al propio Ricardo Corazón de León, al que salva la vida e impresiona -sí, como el Capitán Trueno de Víctor Mora-).  Su blasón es un reluciente cráneo plateado sobre fondo negro, y porta una espada de acero azulado grabada con runas, arrebatada al cadáver de un rey noruego que había dado muerte a su hermano Shane durante una incursión norteña a Munster.

Joe Jusko, nº 2

Joe Jusko, portada nº 2

Sus orígenes son inciertos. Robert E. Howard sitúa su nacimiento en 1162 (en el frag-mento La Princesa Esclava, cuando indica que participa en la Batalla de Dublín con 8 años), y deja intuir que sería hijo de Geoffrey el Bastardo, un normando renegado, supuesto descendiente de Guillermo el Conquistador y «una mujer de los O’Brien», que Keith Taylor identifica con Radharc O’Brien, descendiente del mismo Brian Boru, gran rey de Irlanda (en las páginas de REH – Two Gun Racounter, donde desarrolla y especula sobre el tema con amplitud sobre una impre-sionante base histórica, en su serie de artículos (1) que recomiendo a los interesados). Al Harron también dispone de una elaborada biografía del personaje en The Cimmerian Blog(2), hoy por desgracia cerrado.  Y si alguien quiere leer sus historias en español, nada mejor que acudir a Los Halcones de Ultramar y otras narraciones de las Cruzadas, editado por Barsoom, que ya comentamos en estas mismas páginas.

Cormac (Fuente: The Cimmerian)

Cormac  (Fuente:        The Cimmerian)

Halcones de Ultramar es el primer relato del personaje y, posiblemente, el mejor y más conocido de la serie Ultramar (Outremer, las tierras más allá del mar, donde transcurren estas y otras aventuras escritas por Howard), en el que intervienen como protagonistas personajes históricos bien conocidos, como el citado Ricardo Corazón de León, o Al-Nāsir Ṣalāḥ ad-Dīn el sultán Saladino-, quien le demostrará que hay honor también en el contrincante, más allá del odio hacia el enemigo que se siente en el campo de batalla.

Pero previo a los hechos que se narran, y como se recuerda en él, tras una juventud tumultuosa en tierras gaélicas, Cormac se deja llevar por el entusiasmo de su amigo Eamonn Fitzgerald y se embarca hacia tierra santa en la tercera cruzada, bajo el mando de Ricardo I de Inglaterra; por el camino, invaden Sicilia y conquistan Chipre. Durante la travesía de los cruzados hasta Anatolia tendrá lugar un hecho que influye más tarde en el relato: dos caballeros, el francés Gerard de Gissclin vence en duelo al alemán Conrad Von Gonler, en presencia del propio Federico Barbarroja, emperador del Sacro Imperio, poco antes de su muerte; Von Gonler nunca perdonará haber perdido.  

Saladino, por Couceiro

Saladino, por Couceiro

En 1911, conquistan San Juan de Acre, pero Eamon cae muerto en uno de los ataques de Saladino para recuperar la ciudad.  Es allí donde el Sultán sabe por primera vez de la ferocidad del guerrero con un cráneo en el escudo.  También en la batalla de Azotus, donde Cormac rescata en combate al rey Ricardo, en presencia de sir Rupert del Vaille; y en Jope, donde es salvado de morir por Sieur Gerard de Gissclin.  Cuando se firma la paz, y sus amigos son recompensados (Sir Rupert es nombrado senescal de Antioquía y Sieur Gerard señor del castillo fronterizo Ali-El-Yar), FitzGeoffrey decide viajar a Irlanda. Mas allí no encuentra quien necesite su espada y regresa, para ponerse a las órdenes del hombre que le salvó la vida, y ayudarle en sus contiendas con los sarracenos.  Es aquí donde comienza la historia de Halcones de Ultramar.

El relato es, básicamente la crónica de una venganza, el cobro de una deuda de sangre que el gaélico se ve impelido a realizar por honor, por la memoria de un amigo que ha sido traicionado: cuando llega a Antioquía (un inciso: en el cómic se indica que en 1190.  No es posible: las tropas de Ricardo I desembarcan en Acre en junio de 1191, así que los hechos no pueden transcurrir antes de 1192), Cormac conoce a través de Sir Rupert que Gerard de Gissclin ha muerto y su castillo saqueado y reducido a ruinas, por las tropas de Nureddin de El Ghor, un jeque con aspiraciones que ha roto la paz de Saladino, pero ante la aquiescencia y dejación de su vecino, Conrad Von Gonler, a quien solicitó ayuda y éste se la negó, en recuerdo de la derrota sufrida en duelo.  Fitzgeoffrey irá a por ambos, en solitario, para evitar un movimiento de tropas que rompería la paz.

Venganza

La adaptación al cómic es excelente.  Principalmente, porque Michael Alan Nelson no pretende corregir a Howard (como hacen otros, y fracasan), sino que traslada su relato de forma fiel al nuevo medio, y son las palabras del tejano las que nos cuentan los hechos, sin apenas cambios, sin pretender mejorarlo. Porque R.E.Howard es bueno -muy bueno- en lo que hace -narrar historias, dibujar con palabras que impactan en la mente del lector situaciones, sentimientos y la acción de sus personajes-, y un medio en el que interviene el dibujo como componente básico, si está bien hecho y se integra en la historia, sirve a la perfección para transmitir su legado, como se ha demostrado antes. Eso sí, como complemento a su narrativa única, no para sustituirla.

Y el dibujo de Damián Couceiro (incluso el color de Tumburús) se adapta muy bien a los requisitos exigidos: estilo natural sin llegar al hiperrealismo, un correcto tratamiento y ambientación de la época, y dibujo muy expresivo.  Posiblemente sea esa su mejor virtud: la expresividad intensa y cómplice con la que nos traslada la acción, no sólo con actos y figuras en movimiento, sino mediante los gestos, unas expresiones que traslucen las sensaciones de los protagonistas y cuantos les rodean hasta hacerte sentir partícipe de los mismos.  No muchos lo consiguen; y es justo reseñarlo.  Observad si no la escena en dos páginas (también las anteriores) en la que Cormac ajusticia a Von Gonler, la expresividad de esos rostros que transmiten sentimientos.  Silencios de espada 1Silencios de espada 2Y no sólo gestos. Durante el asalto a la fortaleza de El Ghor, cuando Cor-mac se enfrenta a una treintena de enemigos, la can-ción de las espa- das  se traduce en silencio que impac-ta, y durante 10 páginas sin pala-bras (entre las dos que ofrecemos) asistimos sólo  a ecos de aceros que entrechocan y sangre de vidas que se desvanecen. Todo un acierto, sin duda, que transmite la matanza mejor que las palabras; una idea al parecer del editor Matt Gannon, que resaltamos.

Un cómic no es bueno porque tenga un buen dibujo, sino por las sensaciones que transmite, y cómo lo hace. Y Halcones de Ultramar, os lo aseguro, transmite mucho.  No os lo perdáis.

  1.  Cormac Fitzgeoffrey’s Kin in the Crusades y A Woman of the O’Briens.
  2. Calvaria ad Victoriam: A Look At Cormac Fitzgeoffrey, Part Three.

CormacFitzGeoffrey Yermo

La Casa-Museo de Robert E. Howard solicita tu ayuda.

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En 1989, un grupo de voluntarios de Cross Plain adquirió, a través del Proyecto Orgullo (Project Pride), la casa natal de Robert E. Howard, la restituyó a su estado original y desde entonces la mantienen convertida en Casa-Museo del escritor.  Allí, cada año por junio (REH nos dejó un 11 de junio) se celebra el Howard Day, donde se concentran numerosos aficionados que acuden a conocer sus raíces, y por la noche se reúnen y leen sus poemas bajo el farol de su patio trasero (ver aquí entrada de 2012).

REH y personajes por ML PetersPues bien, Jeffrey Shanks, en las páginas de REH: Two-Gun Racounter, recogido después por REHUPA, la Fundación REH, y otras páginas dedi-cadas al autor y su obra, nos recuerdas que ese grupo de voluntarios se ven incapaces de seguir el mantenimiento con sus propios medios, y solicita la ayuda de los aficionados para continuar el proyecto. Rusty Burke, autor de El Último Triunfo, o Una breve biografía de Robert E. Howard, comentó: «si cada aficionado que alguna vez disfrutó de una historia de Robert E. Howard donase un dólar, nunca más habría necesidad de pedir dinero».  Pero no es así, y se necesita ayuda; por insignificante que sea, sumará a la de muchos.

Las donaciones pueden realizarse, por cheque o giro postal, a Projet Pride, PO Box 534. Cross Plains, TX 76443, o, más fácil, mediante Paypal, a projpride@yahoo.com

Más información, texto completo y numerosas fotografías en el artículo original, pulsando aquí.

En recuerdo de ROBERT E. HOWARD

Hace unos días, el 22, hubiese sido su 108 cumpleaños…

Aunque nos dejó a los 30, con un sinfín de relatos y cuentos de magnífica prosa, que dieron lugar al uno de los pilares básicos del género fantástico: la Fantasía Heroica, subgénero conocido también por Sword and Sorcery, o de Espada y Brujería.  Pero no sólo eso: aventuras a raudales, de corte medieval con trasfondo histórico riguroso, en el lejano oeste que le era tan cercano, o allende los mares soñados; de misterio e imaginación, y terror lovecraftiano, con quien tanto compartiera…

¡Cuánto hubiésemos disfrutado de quedarse un poco más con nosotros!

Aunque nunca nos dejó…, en sus historias.

REH por Sanjulian

Repetimos la imagen de Sanjulián, que tan bien le define… y la portada y contraportada de Berserkr 6, que le dedicamos en su día (1986):

Berserkr 6 - Portada                                                        Contraportada Berserkr 6, 1986 - Muerte de REH, por S. Plunkett_

EL DIOS GRIS PASA, de R.E.H. adaptado por Petri Hiltunen

Ficha EL Crepúsculos del Dios Gris

Corre el año 1014. En Irlanda, las tribus celtas unidas bajo el mando del rey Brian Boru se enfrentan a los invasores vikingos ante los muros de Dublín. Hasta allí llega Conn, un guerrero y hombre del rey que ha sido esclavo, a tiempo para unirse a la batalla y buscar venganza. Pero según describe Robert E. Howard en el relato «El Dios Gris Pasa«, en la llanura de Clontarf no solo se enfrentaron celtas y nórdicos, sino el nuevo dios Blanco de los cristianos, y Odín, el dios Gris pagano de los hombres del Norte; y en el magistral relato que compone el tejano intervienen reyes, príncipes guerreros, héroes, saqueadores, razas antiguas y valquirias, que sobrevuelan el campo de batalla y recogen a sus caídos.  Y sobre ellos, el viejo Dios Gris pasa…

En El Crepúsculo de Dios Gris, Haltunen adapta con fidelidad el relato de Howard. Pero no sólo eso: sus imágenes recrean con todo detalle construcciones, vestimenta y armas de la época, que fueron investigadas a conciencia por el autor para alcanzar el máximo rigor histórico, como suele hacer en sus obras, como el estudio previo de abajo, para su adaptación de la Anábasis (La Marcha de los diez mil) de Jenofonte.

Hiltunen Annábasis

Petri Haltunen es un prolífico autor finés (con pinta de vikingo heavy), poco conocido en nuestro país, pero al que le va lo épico. En más de 20 años ha dibujado numerosas novelas gráficas, e ilustrado libros de este género, como Conan, Tarzán, o Canción de Hielo y Fuego (podéis verlos en su página, pulsando aquí).  En su dibujo, extremadamente detallista, hasta el límite de dibujar una a una las argollas de una cota de malla, abundan las viñetas cargadas de personajes.  En la obra que nos ocupa, por ejemplo, es impresionante su recreación histórica de la batalla de Clontarf, que llega a ocupar casi la mitad de las páginas.

Hiltunen Batalla Clontarf

Hiltunen LRCN 1

Aunque su anatomía no resalte el realismo (a mí no terminan de agradarme sus rostros), sus composiciones detalladas y sombreado de trazo fino resultan impactantes. Entre sus adaptaciones al cómic se encuentra La Reina de la Costa Negra, publicada en España por la revista Sword (ahora disponible en Aleta Ediciones); una obra primeriza sin duda (1991), pero no por ello menos impresionante, con una Bêlit salvaje y despiadada como pocas.  Su evolución desde entonces ha sido constante.

Hiltunen LRCN 4Hiltunen LRCN 2Hiltunen LRCN 3

 

 

Tampoco El Crepúsculo del Dios Gris es una obra reciente, sino de 1994.  Pero no por ello dejará de impresionaros.

Hiltunen Álbumes

CONAN REY, 2: El Fénix en la Espada

Ficha CR2 El Fénix en la Espada

En breves fechas estará a la venta el segundo volumen de la nueva adaptación al cómic de las historias de Conan durante su periodo como rey de Aquilonia, de Dark Horse comics, presentadas en España por Planeta de Agostini.  Como es habitual en la última época, en formato libro-cómic, recopilando en un tomo los cuatro números de la serie original, lo que supone una verdadera novela-gráfica en formato de lujo.

Y de lujo resulta el volumen que comentamos.  Porque, a diferencia de la serie regular que adapta la vida del cimmerio en sus horas más jóvenes, tras finalizar la adaptación de Sombras de Hierro en la Luna, Dark Horse decidió trasladar el excelente equipo creativo a la versión madura del personaje, creando la serie paralela Conan Rey, donde Tim Truman al guión y Tomás Giorello al dibujo, bajo colores de José Villarrubia, mantienen un muy alto nivel de calidad, comparable al de la mejor época de La Espada Salvaje de Conan de Marvel.  Sí, soy consciente de lo que afirmo, porque salvando las distancias de autores, y la inclusión de color, el resultado es bastante significativo:

EFELE 1 Rey(Todas las imágenes se amplían al picar sobre ellas)

Como ya comenté en su día (hace justo un año), en la reseña de La Ciudadela Escarlata, Truman, más allá de sus inicios como dibujante, se revela en esta serie como un adaptador excelente para R.E.Howard. Admirador entusiasta del escritor tejano y estudioso ferviente de su persona y obra, no duda en aportar su propio enfoque a la adaptación y presentarnos la historia como (tal y como REH expuso en carta a P.S.Miller) si el propio Conan, ya en el crepúsculo de su vida (pero aún con aspecto formidable), fuera quien narrase sus hechos pasados a un escriba de la Orden de Cronistas Nemedios, por encargo expreso del consejero Publius.

En esta ocasión, recuerda el intento de asesinato que sufrió en sus aposentos, poco después de alcanzar el trono, por parte de un grupo de nobles conspiradores y el trovador Rinaldo.  En el mismo participa el brujo estigio Thot-Amón del Anillo, quien tras perder su fuente de poder ahora es esclavo de Ascalante, Conde de Thune.  Como contrapartida, Conan recibe la ayuda del sabio Epimetreus, quien yace desde hace siglos en el corazón del monte Golamira. (Este fue el primer relato del personaje Conan, reescrito por Howard sobre «Por este hacha yo Gobierno…«, del Rey Kull, que no conseguía publicar). El cimmerio tiene entre 40 y 41 años, según la nueva cronología de Dale Ripke.

EFELE 2 Ridondo

El resultado obtenido es excelente, y el aficionado a la obra original agradece y disfruta con los numerosos guiños que Truman introduce en la narración, y la enriquece.  Así, contar al escriba la historia de la traición de unos conspiradores al trono 20 años atrás, bajo la estatua de Rinaldo el trovador, uno de ellos, quien le llamaba en sus versos «salvaje de negro corazón», es todo un acierto.  Como lo es recrear en pocas viñetas los momentos previos a los hechos, cuando accedió a la corona tras derrocar al tirano Numedides, para ponernos en situación; o seguir fielmente el relato original, tanto en conversaciones como hechos o detalles mínimos, en el grueso de la adaptación.

EFELE 1 Coronación1

El Conan que nos propone Truman en dos periodos distintos de su vida resulta acertado y creíble: rey sereno, asentado en su papel de hombre de estado sin perder su condición indómita, a los sesenta; inquieto y rebelde a ese mismo papel que debe desempeñar, mientras añora la acción directa de sus generales, veinte años atrás.

EFELE 1 Pueblos del Norte

Gráficamente, el resultado no es menos espectacular.  Tomás Giorello mantiene esa progresión asombrosa en el terreno artístico que ya demostrara en el volumen anterior, conservando el canon Frazetta para el personaje que tan bien definiera Buscema en su día, al tiempo que completa dibujos con contenidos y sombras cercanos a los de Alfredo Alcalá, e incluso completa y rellena viñetas con detalles mínimos y fondos artísticos que recuerdan a Barry W. Smith, pero demostrando una personalidad propia.

Conan-in-his-60s                                                        EFELE 2 Conan a los 40

                                                   EFELE 1 ThothAmon2EFELE 2 Serpiente

Su Conan no es plano: cambia con los años y situaciones; su diseño de página, en el que, gracias a la nueva facilidad de espacio disponible para una adaptación, abundan viñetas a página completa o doble, consigue una narración gráfica de enfoques y planos cambiantes; sus personajes tienen un aire distinto (me gusta su representación de Trocero); y las escenas de acción resultan espectaculares.

EFELE 1 Traición

Pero no voy a extenderme en temas que ya expuse en la reseña anterior, a la que me remito de nuevo; lo podéis comprobar vosotros mismos en los dibujos que acompaño, en el resto de la novela gráfica, que os recomiendo, o recorriendo sus muchas ilustraciones en internet.  Cuán diferente sería su Bêlit, de haber continuado como responsable gráfico de la serie Conan el Bárbaro, en lugar de Cloonan

Belit de Giorello

También el madrileño José Villarrubia participa y aporta su toque personal a la adaptación, y mantiene el sello de calidad que distingue al equipo creativo. Su color es brillante y detallista cuando conviene, sombrío y neblinoso cuando se necesita, como esa espectacular secuencia de acceso a las entrañas de Golamira

EFELE 2 Golamira Secuencia

En resumen, una obra para disfrutar, que recomiendo especialmente a aquellos aficionados desilusionados con la progresión (caída, más bien) sufrida por la serie de Dark Horse desde aquellos inicios espectaculares.  Este volumen merece la pena.

Como también la adaptación de La Hora del Dragón, única novela del personaje que escribió Robert E. Howard, y que el mismo equipo creativo está adaptando actualmente en 2 volúmenes (2 miniseries de 6 números). La portada extra de Sanjulián, que ya publicamos en su día es espectacular (ver aquí).  Y excelentes las de Gerald Parel para cada número de la serie (la primera acaba de finalizar):

La hora del Dragón 1-6 Gerald Parel

Y el interior, similar a lo de arriba ¿a que os atrae?

Hablaremos de ello en su momento…